El mundo de la música tropical tiene en Michel Arencibia a uno de los jóvenes cantautores de mayor dimensión. Su carisma indiscutible y su impactante salero han puesto al descubierto a una revelación de la canción latina que llegó para quedarse.
Aunque su propuesta discográfica navega por diferentes géneros, lo que más disfruta este cantautor es la salsa, y razones tiene de sobra. “Desde niño, escuché mucho las orquestas cubanas, tuve influencia también de músicos puertorriqueños y colombianos, y mi familia siempre escuchó mucha música tropical”, expresa el cantante de 28 años, quien creció disfrutando la música de Los Van Van, La Orquesta Original de Manzanillo, Beny Moré, Celia Cruz, Paulito FG, Isaac Delgado, Pupy y Los que Son Son, Adalberto Álvarez, La Charanga Habanera, Marc Anthony, Gilberto Santa Rosa y Oscar D’ León. Y ha sido este ritmo que lo ha dado a conocer, a pesar de que su versatilidad no tiene límites cuando se trata de armar una tremenda fiesta frente a multitudes.
Arencibia dejó su natal Sancti Spiritus, Cuba, a muy temprana edad, cuando su padre tuvo que trasladarse a Costa Rica con la familia, en el 2000. Pero en este país continuó formándose musicalmente en escuelas y actuando en festivales. “Pero no lo hacía profesionalmente, me fui de Costa Rica, en el 2007, a Guatemala, porque de nuevo cambiaron a mi papá de lugar, él es químico”, relató.
En Guatemala es donde arrancó su carrera profesional, la cual ganó impulso desde que colocó en el mercado “Bésame”, en el 2012. “El videoclip se grabó en el Teatro Abril, y la repercusión de la canción fue muy buena en Guatemala, donde la salsa es un género que no es muy fuerte”, dijo el artista que ha compartido escenarios con figuras de la talla de Gilberto Santa Rosa, Luis Enrique, y agrupaciones como la Orquesta Filarmónica de Costa Rica, La Sonora Carruseles de Colombia, La Solución y la Orquesta Madera Nueva, entre otras.
Luego de ganar repercusión con “Bésame”, estrenó “Para qué esperar”, la cual estuvo en el top 10 de las emisoras más importantes de Costa Rica por 17 semanas consecutivas y se convirtió, en el 2014, en uno de las 12 temas más sonados.
Otros éxitos de su joven repertorio es “El único” y “Por qué se acabó el amor”, los cuales formarán parte de su disco de debut.
“Soy una persona que cree que un artista debe ser versátil, hay que tratar de convencer a todo tipo de público y eso es lo que tengo, mucha versatilidad en mi música y mis shows… creo que ser salsero es una etiqueta muy fuerte”, expresó Michel Arencibia.
Confiesa que a pesar de nacer en Cuba, emigrar a otros países le ha permitido tener marcadas influencias de muchos géneros como la cumbia, el merengue, el vallenato. “No me quiero encasillar en un género tan fuerte… puedo hacer muchas cosas porque la música es infinita”, puntualiza.
Uno de los trabajos discográfico que más ha disfrutado fue la Serie Music All Star, donde reunieron a los mejores músicos de Costa Rica para hacerle un homenaje a Juan Luis Guerra. “Dejamos la propuesta abierta para hacer lo mismo para otros artistas, eso lo hicimos conjuntamente con la Filarmónica de allá. En total era un grupo de 60 músicos y bailarines”, indicó el novel salsero, quien ahora reside en la ciudad de Miami, donde inicia una nueva etapa de su vida.
“Lo más duro es dejar tu familia atrás y tu país, tus costumbres; mis padres están en Nicaragua y mi hermana vive en Houston. Tengo familia en muchos lugares, pero uno tiene que marcar su propio destino y luchar por sus convicciones y eso es lo que estoy haciendo”, puntualizó.
Hoy se presenta en uno de los escenarios más respetados del sur de la Florida, El Tucán. Allí, junto a su orquesta, interpretará gran parte de su repertorio.